¿Vamos a los museos como las hormigas? #DíaInternacionaldelosMuseos

El 18 de abril es conocido como el Día Internacional de los Museos, sin embargo ¿Qué implicaciones tiene esto? ¿Cómo lo festejamos? En el mundo se realizan diferentes actividades con el fin de que cada vez más personas asistan a museos, por ejemplo, en México la entrada a la mayoría de los museos es gratuita. En ciudades, como San Luis Potosí, se promueve el hashtag #DíaInternacionaldelMuseoSLP  además existe una cuenta de Twitter, todo con el fin de difundir y apoyar este día.

Por cierto, la imagen para San Luis Potosí, fue realizada por la agencia Nest Branding, agencia que tiene dentro de sus proyectos la Revista RGB Arte para todos.

Foto por Pepe Juárez

Richard Cork y los recorridos hormiga. 

Me considero fan de asistir a museos y a exposiciones, en lo personal no podría decir cuál es mi favorito pero como mercadóloga considero que el Museo de la Revolución es un claro ejemplo de lo mucho que podrían aplicar no solo los museos de San Luis Potosí sino de todo el país.

En este post retomo una reflexión de Richard Cork, un brillantes curador de arte:

“Debemos observar la obra con la misma pasión con la que fue creada” 

¿Qué sentido le podemos dar a esto? En mi opinión considero que esta reflexión es clave a la hora de administrar museos ¿La razón? Tanto el artista como el público deben de estar comprometidos con la obra, o al menos eso sería lo ideal. Richard Cork, utiliza el termino de “recorridos hormiga” para referirse al comportamiento que se tiene actualmente en los museos de parte de los asistentes.

A continuación, una aplicación de este termino:

Imaginemos una exposición, en ella se invierten recursos económicos, humanos e intelectuales, se organiza y se realiza el evento de inauguración y se determina una fecha de permanencia en el museo. Ahora, vamos a plantearnos las siguientes cuestiones:

¿Cuál es el ROI de esta exposición? ¿Los esfuerzos que se emplearon son equivalentes a las personas que se tuvo alcance con la exposición? Es importante recordar que el ROI no siempre es cuantitativo, es decir se expresa en utilidades monetarias, el ROI también puede verse reflejado en cuestiones cualitativas como: aprendizaje, fomento a la expresión artística, apreciación, etc.

Ahora ¿Qué impacto tiene la exposición? Par medir impacto, primero debemos tener objetivos alcanzables y definidos.

Teniendo lo anterior, ¿Ya tenemos una idea de que puede ser un recorrido hormiga? Si aún no…sigue leyendo.

 Sala_de_Tiziano_en_el_Museo_del_Prado

Sin embargo,  Un recorrido hormiga es un comportamiento del consumidor que afecta a las organizaciones culturales, Richard Cork nos dice que actualmente las personas que asisten a los museos tienden a pasar frente a las obras sin prestarles la atención necesaria, pasan frente a una fotografía, pintura, ilustración, luego van a su casa y  recuerdan poco o nada de lo que han visto. 

¿En qué manera afecta a los museos?

  1. No se cumplen objetivos, siendo que el objetivo de exponer una obra sea el conectar al artista con el público.
  2. No se logra la conexión artista-publico. En este supuesto, opino que como la información, “Aquel arte que no se comparte no existe y no vale” ¿De que sirve al artista crear si no comunica?
  3. No se ofrece una experiencia que el consumidor pueda recordar. ¿De qué sirve que 1,000 personas asistan a una exposición si no recuerdan nada o se quedan con algo de la obra? Es como ir a una clase y mandarte papelitos toda la hora con tus amigos, sin poner atención al profesor que trata de explicar algo.

¿Como evitamos los recorridos hormiga?

Richard Cork nos dice que este fenómeno no ocurre en las artes escénicas, en el cine o en un concierto, ya que por la forma de consumir este tipo de arte, si bien no siempre se tiene una conexión con el publico, al menos se tiene más atención a diferencia de ir a ver una exposición de fotografía o pintura.

¿Qué hacer para que las exposiciones sean más atractivas?

En mi opinión estoy a favor de museos interactivos y exposiciones que participen con la audiencia de forma más directa. Algunas recomendaciones son:

  1. Tener guías apasionados con la exposición que se presenta, pero ojo, los guías deben de ser solo para personas que así lo deseen, ya que debemos tomar en cuenta a los dos tipos de consumidores de obras de arte: A los que les gusta que les expliquen y a los que no. En lo personal, prefiero observar la obra por mi parte y después escuchar una explicación, aunque existen personas que solo prefieren una forma.
  2. Que el ir a un museo sea una experiencia, se debe de romper con el mito de “Ir a museos es aburrido” Las organizaciones encargadas, deben de tener bien claros sus objetivos. Suponiendo que se tiene el objetivo de atraer más personas a los museos, se deben de crear estrategias que permitan que asistan todo tipo de personas, es decir, se deben de segmentar las exposiciones y comunicar.
  3. Se debe de ver a los museos, como una empresa. Existe el marketing cultural, sería perfecto que todos los museos lo tuvieran. Hay que tomar en cuenta que el marketing representa una mejora o áreas de oportunidad. Los cambios requieren inversión, para ver resultados…invierte.

Para terminar, me gustaría mencionar que en el marketing cultural primero el artista crea un producto y luego la función del mercadólogo es encontrar el público adecuado. Por lo que para evitar los recorridos hormiga por parte de los asistentes, la palabra clave es atraer y segmentar.

Apoyar a los museos y artistas no es solo asistir a las inauguraciones, es apreciar y valorar el trabajo creado.

 

Fuente: Stephen Farthing . (2011). : Arte. Toda la historia. España: Blume.

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