El contraste que uno encuentra en el cine mexicano es muy notorio: Desde excelentes historias hasta las que quisieras borrar para siempre de tu mente. Nos podemos como espectadores más que esperar lo mejor, aunque no siempre se acierte.
María Laura o “Mala” Medina como le dicen sus amigos, personificada por Aislinn Derbez es una joven actriz desempleada, que en su desesperación y por la inseguridad de su amiga hacia la fidelidad de su novio, lleva a la protagonista a darle honor a su apodo de malota y se convierte en algo así como “Caza-Infieles”. La trama encuentra su momento cúspide cuando su trabajo como depuradora de cabrones la lleva a tratar de seducir a Santiago, empresario interpretado por Mauricio Ochmann.
A la mala bajo la dirección de Pedro Pablo Ibarra no podría estar más llena de momentos predecibles y situaciones sin sentido. ¿Una actriz “pobre” puede, de un momento a otro tener un vestido de diseñador para un evento de gala? Sabemos que son recursos propios del cine pero hay cierto grado de credibilidad que simplemente no se puede romper.
Me sorprendí en varias ocasiones bostezando y odiando los intentos de actuación de Aislinn, que si bien logra parecer creíble esto solo lo consigue al final. Mauricio hace lo mejor que puede, pero incluso en el los diálogos que quieren parecer profundos y filosóficos quedan en lineas mas bien recitadas. Se le ve incomodo, pero logra (como todos) opacar a Derbez en todo momento.
La película tiene momentos que te sacarán risas, cosa que no sería posible sin el soporte de Juan Diego Covarrubias que en los pocos momentos que tiene en la pantalla logra robarse los aplausos. Luis Arrieta lo vemos en casi todas las películas mexicanas del momento y aunque ha demostrado poder ser un actor cómico de buena calidad, en este largometraje tiene altibajos que puede excusarse una vez mas con el guion forzado.
A la mala cae en lo moralino. Se hace de recursos muy arraigados y desgastados que ya hemos visto en infinidad de veces.
Estamos a tiempo de darle importancia que se requiere y exigir buenas comedias mexicanas (que las hay) para no caer en pagar un boleto para una telenovela mas.
Veredicto: Aléjate de ella.
Nota: No soy critico de cine. Esta es mi Review y expreso solo lo que las películas me hacen sentir.
