A finales del 2012, decidí emprender mi propio negocio. Siempre he creído que la mejor forma de conseguir lo que quiero es por medio de ser empresario. Sin embargo mis primeros pasos en ese camino fueron en círculos, cometí muchos errores que me gustaría que conocieras si estas emprendiendo o si estás a punto de emprender.
El negocio que emprendí estaba basado en la venta de productos nutricionales dirigidos al consumidor final. El iniciar este negocio me ayudó a conocer la forma perfecta de cómo NO emprender. A partir de junio de este año tomé la decisión de dejarlo y abrirme a otras posibilidades. En noviembre se estará cumpliendo un año de la fecha del lanzamiento de ese negocio.
Cometí muchos errores sin embargo creo que estos fueron los más críticos:
1. Falta de conocimiento del mercado; en mercadotecnia no se cansan de decirnos que debemos estudiar el mercado antes de tomar una decisión, yo me fui por el otro camino. ¿Por qué? Conocía casos de éxito que habían emprendido en este sector, con el mismo giro, y que no habían estudiado nada. Lo sé, se me hizo fácil. No consideré estudiar quiénes podrían ser mis consumidores, y mucho peor; no consideré a mi competencia. De haber recabado un poco de información, no habría colocado mi producto en esa plaza, la competencia manejaba un precio en el que casi regalaba su trabajo, tuve que adaptar mi propuesta de valor a esa situación, que terminó afectando mi estrategia de negocio.
2. Creer que el emprender lo era todo; tener la materia prima necesaria así como el equipo de trabajo para arrancar no lo es todo, necesitas trabajar duro si quieres ver resultados. Tenía la errónea idea de creer que porque ya había arrancado mi negocio, lo demás “caería solito”, después me di cuenta que lo único que cae del cielo es la lluvia. Tienes que esforzarte.
3. No contemplar tener un “colchón financiero” de cuando menos 6 meses de renta; este es un punto muy crítico, cuando arrancas con un negocio debes saber que el negocio quizá no va a vender lo que proyectaste en el pronóstico de ventas, pasará un poco de tiempo en lo que tu estrategia de comunicación comienza a rendir sus frutos, si no contemplas este fondo, terminarás usando las primeras utilidades de tu negocio para pagar renta e incluso te puedes quedar sin fondos para tu capital de trabajo (materia prima, mano de obra, gastos indirectos de fabricación, etc.)
4. No contemplar un horario fijo; cuando emprendes, se te hace fácil salir 15 minutos antes o cerrar un día el negocio. Esto sucede más, creo yo, cuando trabajas y estudias. Sea cual sea el trabajo que vayas a realizar te recomiendo que te apegues a un horario de trabajo sin excusas o pretextos.
5. Falta de enfoque; cuando estas empezando tu negocio y más cuando aún no obtienes los resultados esperados es de vital importancia que te enfoques en tu negocio de manera obsesiva, no pierdas de vista el objetivo que te has planteado, no te llenes de actividades que pongan en riesgo la viabilidad de tu proyecto. Si dijiste que ibas atender tu negocio, por dar un ejemplo, de 8 a 2pm ten por seguro que en el resto del día tendrás que hacer actividades que se relacionan con el mismo y que tendrás que dedicarles tiempo. Organízate de manera semanal, mensual, anual o como quieras pero organízate.
¿Eres emprendedor? ¿Has cometido otros errores que te gustaría compartir para ayudar a otros emprendedores?
Una vez dijo un maestro que el aprendizaje sale caro, por estos errores yo perdí un poco más de 40 mil pesos, pero sin duda fue un aprendizaje muy fuerte para mi, de esos que no aprendes en la escuela. Siempre he tenido las ganas de tener mis propios negocios, cuando fallé me di cuenta que probablemente iba a pasar a esta edad o en otra, me sentí satisfecho de dar ese paso a esta edad, ya que puedo avanzar de manera más rápida, reconociendo ese camino que ya no debo tomar.
Sin duda de los mejores aprendizajes que tuve fueron; no creas que puedes hacer las cosas solo, utiliza todos los recursos que tienes a tu alrededor tanto materiales como humanos. Y lo más importante fue aprender a “soltar”, este negocio era un sueño para mi, tenía más de 5 años esperando ese momento de crearlo, si me hubiera aferrado a él pese a los resultados hubiera afectado más mi economía, y quizás me hubiera afectado mucho en mi persona.
Por último no me queda más que dar este consejo:
No importa que las cosas vayan mal, no dejes de ser entusiasta en lo que haces, entrégate, quizá las cosas no se den con la gravedad que tú quieras, pero sin duda estarás más cerca si no dejas de insistir.
Nos estamos leyendo 🙂
