Editorial: El Exorcista III ¿Acierto o fracaso?

¿Es el Exorcista III una obra poco valorada o simplemente una mala secuela que está lejos de la primera?

Siendo la tercera entrega de la saga que comenzara en el año de 1973, El Exorcista 3 trata de reivindicar el camino perdido con la segunda, ignorando por completo los sucesos de aquella película (que es una verdadera desgracia considerando que su fracaso significó el rechazo automático a cualquier otra conexión con la primera cinta). Partiendo de esto, podemos decir que si bien el título de “El Exorcista” genera una carga mediática a cualquier película debido al lugar de culto en el que encuentra, esta secuela por sí sóla es una buena historia con momentos destacables. William Peter Blatty repite como guionista y director, lo que permite a la película tener una conexión natural con la primera historia aunque, como dije, este largometraje bien pudo ser una cinta independiente y alcanzar un mayor alcance.

Evidentemente“El Exorcista”es una obra maestra de terror cuyo legado aún permanece en nuestros días, pero en defensa de The Exorcist III debo decir que la forma magistral con la que se maneja el terror psicológico y el miedo a lo desconocido (tal y como sucede en la primera)es digna de resaltar. Aquí se plantea una continuación de la historia original que poco a poco irá tomando un camino propio, teniendo como protagonista al Teniente William F. Kinderman, quien reaparece en la saga investigando una serie de asesinatos y es a partir de aquí que se desencadena todo. Una combinación entre suspenso y terror que da como resultado una historia cuya atmósfera atrapa a cualquier amante del terror; basta con recordar escena realmente perturbadoras como los asesinatos con unas tijeras de podar o las posesiones demoníacas que se ven a lo largo del filme.

Regresando al guion, Blatty consigue resaltar la lucha entre el bien y el mal, haciendo énfasis en que la creencia hacía alguno de los dos bandos determinará el fin de la persona, también explica de manera detallada como el mal puede apoderarse del cuerpo y con ello buscar esparcir el terror a todo aquel que le hago frente. Otro personaje que regresa es el Padre Karras, pero lo hace de una forma diferente ya que, en un hospital psiquiátrico, un paciente sin nombre despierta después de un largo coma, trayendo consigo el aspecto del fallecido sacerdote. Lo interesante de esto, es que el paciente dice ser el asesino serial “Génisis”, cuya ejecución concuerda misteriosamente con la fecha del exorcismo de Regan MacNeil.

Dicho lo anterior, parece interesante la forma en la que se combina un thriller policíaco con eventos paranormales, aunque claro, esto limite en gran medida algunas secuencias optando por aclarar los sucesos con una explicación sobrenatural. Prueba de ello es su final poco convincente que hace caer a la película por complemento después de haber conseguido una trama casi perfecta. Cabe mencionar que el propio director tuvo problemas con este desenlace pues su novela “Legión”(de la cual se basa para realizar este trabajo) dista totalmente de lo visto en la pantalla grande.

En conclusión puedo decir que The Exorcist III debe ser analizada como una película independiente puesto que las necesidades comerciales de la producción obligaron a conectar dos cintas que si bien comparten características y personajes, distan totalmente del enfoque que quieren mostrar. Puede que no sea una película perfecta y los fallos en ella hacen que las críticas sean más severas, en especial si se le compara con la película de 1973, pero en todo caso, y como parte de una mítica saga, cumple con el propósito de contar una nueva historia manteniendo una esencia que sólo su creador pudo plasmar.

Pasarán los años y el debate seguirá. Por lo mientras, nos queda disfrutar de la serie.

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