Triste desempeñó hoy de la Selección Mexicana ante su similar de Guatemala en lo que fue su 2do partido en esta Copa Oro. Un equipo sin ideas, sin profundidad y faltó de fútbol que no supo descifrar el partido que le propuso el rival.
Un partido rispido, de mucho roce y con pocos espacios fue el que propuso Guatemala, que jugo a esperar el más mínimo error de los mexicanos y que casi obtuvo premio en los primero minutos del juego, tras un grosero error de Vazquez, pero no supieron capitalizarlo. México obtuvo llegadas a base de centros y producto de las constantes faltas; Guardado tuvo las más clara en boca de arco pero su disparo fue directo a la colocación del arquero, además de que no se señaló un penal en favor del Tri por clara mano de Ruiz.
En la segunda mitad Herrera intento abrir el juego con la entrada de Carlos Esquivel quien aportó desequilibrio y frescura al ataque. Sin embargo las llegadas mexicanas seguían siendo producto de centros, nunca encontraron el juego de asociación. La expulsión del Guatemalteco Contreras (70 min) no cambio el tenor del partido, los Chapines siguieron defendiendo el empate en su área y México agobio con centros sin generar mayor peligro. Las entradas de Dos Santos y Orozco fueron un claro ejemplo de la desesperación que ya vivía Herrera sobre el final; algún día se entenderá que no por meter más delanteros atacaras de mejor manera.
El empate deja a Guatemala con esperanzas de clasificar ( enfrentará a Cuba) y a Mexico con la obligación de ganarle a Trinidad y Tobago si quiere ser primero de grupo; ademas de las dudas que ha dejado el desempeño de esta noche. Definitivamente se esta muy lejos de un juego en conjunto, más trabajo y menos publicidad señor Herrera.
