México es un país que cuenta con una gran cantidad de personas que tienen mucho talento por compartir; el problema, es que a su vez este talento se ve encerrado en innumerables estereotipos privándole las oportunidades a aquellos que se salen de lo “normal” o “cotidiano”.
Como Mercadólogo y Músico me he encontrado con gente que dice que la Cultura y la Mercadotecnia no se pueden mezclar, pero en los últimos años ha crecido la tendencia hacia la creación de estrategias por medio del Marketing Cultural (para leer mas sobre Marketing Cultural te comparto un articulo de mi amiga y colega Dulce Mireles).
Lamentablemente el Marketing cultural en la industria de la música ha tomado un rumbo en el cual grandes empresas (no todas), definen los estereotipos en distintos géneros musicales, para poder llegar a grandes masas con música “comercial”, y con el término comercial me refiero a que la música debe pertenecer a un genero ( Pop, Rock, Norteño, Etc.) y se debe respetar un vestuario, letras, escenario en base a ese genero para poder ser vendida. Pero ¿qué pasa si un artista/banda busca salirse un poco de lo cotidiano?; al mezclar sonidos, escribir letras distintas, vestirse diferente de lo que marca la industria, muchos quedan en el camino al no recibir una oportunidad para ofrecer su talento.
Recientemente tuve un muy grato encuentro con la música de Carla Morrison que además de ser un artista diferente por sus letras y manera de cantar (que me agrada mucho), también cuenta con una mentalidad distinta ya que creó “Pan Dulce Productions”, una productora ejecutiva que impulsa con recursos a proyectos musicales independientes que necesiten apoyo ejecutivo.
La cantante de Tecate, Baja California no califica a Pan Dulce Productions como una disquera o como una compañía de management, sino que es una productora que apoya a bandas o artistas independientes como muestra de empatía a todos aquellos que luchan por salir adelante.
Esta forma de trabajo me llamó mucho la atención ya que Carla al ser una artista indie, crea un proyecto que vence todos esos paradigmas de la música y la comercialización; ese ganar-ganar en donde las empresas (disqueras o de management) buscan un retorno de inversión a corto plazo se vuelve obsoleto en Pan Dulce Productions ya que su principal objetivo no es la rentabilidad, sino apoyar a bandas independientes con recursos de la productora que le serán regresados en un futuro sin ningún tipo de interés económico. El ganar – ganar se sigue presentando aunque de manera distinta, y a pesar de no verse reflejado a simple vista, todas las partes salen ganando.
Carla Morrison y Pan Dulce Productions tienen una visión que hace falta en México, son pocas las personas que comparten sus historias y apoyan a otros para que salgan adelante. Y esto no solo aplica en música; el talento en nuestro país se encuentra en muchos otros lados y si nos apoyamos, estoy seguro que el éxito será más dulce.
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Contacto Pan Dulce Productions:
Correo | pandulceproductions@gmail.com
Twitter | @PanDulceProduc
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