Hoy es el turno de escribir sobre una de las películas más representativas del famoso director Alfred Hitchcock, así es Psycho o en español Psicosis, hablar de esta película es como hablar de un comercial de televisión basado en un cortometraje, puede que muchos reconozcan escenas épicas por el comercial, pero realmente no han visto el cortometraje, algo muy similar a pasado a lo largo del tiempo con esta película, por ejemplo; todos conocemos la famosa escena de la bañera procedente de este largometraje, pero muchas personas realmente no han visto la película, ya sea porque es vieja o simplemente porque la gente piensa que no será tan buena por no tener la calidad de muchas películas actuales, y aunque tal vez en aquel tiempo no tenían los efectos especiales para hacer el grande e inmenso trasero de Hulk saltando a lo largo de la pantalla, si contaban con el talento de uno de los grandes de la historia cinematográfica.
La verdad es que la película no cuenta con una trama muy compleja, si tuviéramos que representar la trama con una palabra, tendría que ser una con un significado completamente opuesto a complejo, para empezar todo gira entorno a Marion Crane la misión de cualquier protagonista, a esta le encargan llevar una suma de dinero considerablemente alta del lugar donde trabaja al banco, pero en vez de eso decide seguir el consejo de sus amigos los políticos mexicanos y quedarse con el dinero, bueno, realmente las cosas no pasaron así, pero en fin, decide quedarse con todo el dinero, pero no la juzguen era eso o casarse con un anciano al borde de la muerte con suficiente dinero como para salir de compras a alguna parte de Europa, bueno prosigamos, una vez toma la decisión de no dejar el dinero en el banco, y posteriormente toparse en la calle mientras ella conducía su carro cara a cara con su jefe, entra en preocupación, por lo cual decide marcharse de la ciudad, al parecer por tiempo indefinido, después de un viaje agobiante se aloja en un motel solitario y un tanto deprimente, que es donde conoce a Norman Bates, dueño de dicho motel.
Norman Bates en primera instancia parece un tipo bueno, común y corriente, pero Marion se da cuenta con el tiempo que realmente está un poco perturbado, y que tiene una muy rara relación con su madre, una relación poco usual entre madre e hijo, sobre todo con un hijo con suficientes bellos en los testículos, pero eso ya sería divagar demasiado en la personalidad de Norman Bates, la película cumple con su género, el suspenso, pues en muchas partes dentro de la película, podremos sentir esa sensación, digna de reconocerse como parte de un arte audiovisual de suspenso, lo interesante son todas esas escenas que pueden parecer insignificantes para el espectador, pero que para el personaje en la pantalla parece atormentarle, algo que percibimos gracias a la actuación del personaje y la música, que tuvo y tiene gran importancia en cualquier película actual y tan antigua como en el auge del cine mudo.
Esta película es una buena recomendación para todo aquel interesado en el cine de suspenso, además ¿qué mejor director de suspenso que Alfred Hichcock?, lo que hace este director es darnos un viaje dentro de la película, produciéndonos sensaciones como si pudiéramos influir en la historia de la película, al saber todo lo trágico que le ocurrirá a los protagonistas momentos antes de que suceda, lo cual es el objetivo de este género, eso es todo lo que tengo para decirles sobre esta película, una buena opción en un día tan aburrido como hoy, es eso o lamentarse porque mañana es lunes, ustedes eligen.