MUJER:
Cuando hablas te oigo, más bien te siento
Camino sobre tus muslos y te platico mis secretos
Tu: espigas escotadas, me arrullas en silencio
Dejas que te socave, en ti, en tu cuerpo.
Me dices de las cosas que yo no entiendo
De los hombres y sus males
Del cielo y la tierra y el fuego y…
Y yo: más bien te siento, no te entiendo.
Cuando gritas te oigo, más bien te temo
Te pareces al hombre en tu actitud guerrilla
Me escondes tus noches con sus estrellas pálidas
Y te quedas absorta en ruido y silencio.
En tu nube mortal la luz te envuelve
De la lluvia que cae en ti mujer discurres un nuevo vestido
Del sol, un camino. Me sonríes y yo: te admiro
Pero más bien te temo, no te entiendo
De tu boca nacen los más tiernos retoños
De tus palabras los más frescos manantiales
De tu seno las montañas y de estas los hombres
Nos arrullas y nos envuelves
Cuando hablamos: nos sientes
Cuando gritamos: nos temes
Si quemamos: ardes
Si socavamos: mueres
Mi mujer eterna del silencio de piedra
Háblanos no con tus semillas doradas
No con tus crepúsculos fervientes
Háblanos con palabras y dinos como padeces
En ti me acosa un extraño silencio
¡Ah, me arrullas con tus vientos!
¡Ah, me reclamas con tus valles secos!
Pero somos tan tontos, que no te entendemos.
Poema escrito a la Naturaleza.
Aníbal Santamaría