Como lo he mencionado en mis entradas anteriores, cada vez más, las empresas están haciendo de las emociones y sentimientos, un elemento para vender sus productos.
Conforme el tiempo avanza, la venta de juguetes para niños se vuelve más complicada, ya que los pequeños cada vez se interesan menos por un juguete “clásico” y prefieren un regalo navideño un poco más “tecnológico”.
Tabletas, celulares, computadoras portátiles, entre otras cosas, están más alcance de los niños haciendo que se vuelvan uno de sus principales distractores.
LEGO esta consciente de esto, ya que en su ultima campaña enfoca su mensaje no solo a los niños, sino que incluye a una figura paterna dentro de todo el comercial; pero, ¿Por qué enfocar el anuncio a los padres, si los consumidores del producto son niños?, la respuesta en mi opinión esta en la nostalgia, ya que a pesar de que la persona que más influya en la compra sea el niño, los papás son los que a final de cuentas compran el producto, por lo que si el mensaje muestra todos aquellos momentos que los adultos vivieron de pequeños, es muy probable que deseen que sus hijos vivan esa hermosa etapa de la infancia como lo hicieron ellos.
Constantemente escucho a mis familiares (los que son padres de familia) mencionar que antes la diversión era más sana, y que los distractores en la actualidad no son tan buenos como los que ellos utilizaban en su tiempo.
Es por eso que la estrategia de la firma danesa me parece acertada, ya que tiene una coherencia con los valores de la empresa y buscan posicionar a la marca en el lado sentimental dejando totalmente los aspectos técnicos del producto (precio, calidad, variedad de producto, entre otros) de esta manera los padres recordaran la marca de una manera positiva aumentando las probabilidades de que les obsequien juguetes LEGO en esta Navidad.
Nos leemos pronto.
Fuente: La Cratura Creativa
